Un año más, nuestro instituto se presentó al certamen de debate de la Comunidad de Madrid, obteniendo unos resultados más que merecidos. Los dos equipos seleccionados, estuvieron meses preparándose, entrevistando a familiares, realizando estudios entre los padres y otros compañeros, búsquedas de información, y a la vez que aprendiendo cosas nuevas y fortaleciendo las que ya sabían o al menos creían saber.
En los debates, ambos equipos trataron temas distintos, como las relaciones personales, la educación, la igualdad de oportunidades y acceso a la información, entre otros, diciendo los puntos favorables y perjudiciales de cada uno de estos.
Se nombró la felicidad de nuestros padres, ya que tenían la satisfacción de labrarse su propio camino y no ser siempre el centro de atención; esto contrapuesto con las facilidades que se dan en la juventud actual, lo que favorece unas oportunidades que antes eras menores y en algunos casos nulas.
Ahora la educación es una puerta abierta a todos nosotros, acompañada por el apoyo institucional y social. La escasez de esto hace unos años provocaba unos peores cimientos para el futuro y una desigualdad de oportunidades, no solo entre chicos y chicas, sino también entre personas extranjeras y residentes aquí, y personas del medio rural y urbano, ofreciendo a la nueva juventud un abanico inmenso de oportunidades.
El acceso a la información también fue uno de los puntos fuertes, al igual que el supuesto “ser insatisfecho” que esto ha provocado. O las mejoras en cuanto a educación, ocio, libertad e igualdad, a su vez contrariadas con el escaso respeto a nuestro entorno y el estancamiento en la adolescencia de una gran mayoría de los jóvenes actuales.
Durante este certamen hemos nombrado también algunos autores, filósofos, escritores o incluso e-mails anónimos que apoyaban nuestros argumentos.
El primer equipo no pasó de las primeras rondas ya que estos eran nuevos, fue su primer año de competición y tuvieron unos rivales superiores, todo llevó a su derrota; pero “pelearon” por conseguir la máxima puntuación. El segundo equipo creció un puesto frente al año anterior, quedando en un satisfactorio quinto lugar y llevándose un premio de 600€ a repartir entre los integrantes del grupo.
Desde aquí, decirles enhorabuena a todos los participantes y animar al resto de alumnos a la participación en el concurso en próximos certámenes. También nos gustaría dejar una pregunta en el aire: ¿Vivimos mejor que nuestros padres a nuestra edad?
Diego Fuentes Rodríguez (4º B)
